El concejal Ignacio Maiztegui resaltó la gestión y la distribución de dinero, remarcó la responsabilidad del Ejecutivo y la mirada a la hora de distribuir los fondos
El presupuesto se duplicó entre lo presupuestado y lo recaudado y con eso las partidas graficadas a fines del 2023 resultaron diferentes a la rendición de cuentas.
“Se aumentaron las partidas destinas a subsidios a entidades por las dificultades económicas, estuvieron arriba de los 500 millones de pesos” argumentó Maiztegui.
En cuanto a las críticas de la oposición, respondió: “Se puede diferir cuáles son las políticas de gestión, ver a dónde se destinan los recursos, pero más allá de las cuestiones ideológicas y políticas el Tribunal de Cuentas de la provincia de Buenos Aires viene semana tras semana a controlar el destino de los recursos”.
Otro de los reclamos de la oposición es poder utilizar el sobrante de año tras año para cuestiones necesarias para los vecinos. “El superávit demuestra la responsabilidad de este gobierno a la hora de utilizar los recursos, muchas veces se critica, pero eso permite afrontar cuestiones que no estaban presupuestadas o imprevistos, este año se pavimentó Miguel Cané y los 2300 metros de Pellegrini”, graficó el edil oficialista.
Tal sobrante fue de 3000 millones de pesos “lo que significa casi la masa salarial que tiene el municipio mes tras mes” conocido es que un poco mas del 50 % del presupuesto se destina a sueldos, siendo “2234 millones de peso por mes”, finalizó.