PERGMINO, Mayo 11 (www.PergaminoCiudad.com.ar) En la mañana de este viernes se llevó a cabo la segunda jornada del Juicio Oral y Público por el caso Spartacus donde se juzgará por trata de personas y promoción y facilitación de la Prostitución .

Carmen Beatriz Wagner, era funcionaria dentro de la Dirección Nacional de Migraciones en la provincia de Misiones, cuando en 2007 en la frontera se encontró con la joven de 16 años, María Evarista Gonzáles Vera, quien fue la niña que logró escapar de Spartakus y allí comenzó la investigación.

“Entre la gente vi una niña que no tenia padres al rededor y me acerque a preguntarle si estaba esperando a sus padres, y me dijo que estaba esperando un salvo conducto”, comenzó diciendo la testigo.

“Yo la seguí observando y le pregunte si quería tomar un desayuno, entonces llevo a la niña a la oficina y le doy de comer. Después le pregunto donde estaban sus padres, y la chica comenzó a sentirse mas tranquila y me dijo que se había escapado, me dijo que estaba asustada porque se había escapado de un lugar muy feo que estaba en Pergamino, y que se llamaba Spartakus”, agregó.

La testigo también declaró que la chica fue traída con engaños, según lo que le comentó en esa oportunidad, donde trabajaría como empleada doméstica pero al llegar al lugar, le pidieron que se sacara la ropa y  que debía atender a clientes, manteniendo relaciones sexuales, bajo amenazas y sacándole los documentos.

“Ella logró escaparse y no sabe cuanto estuvo en ese lugar porque perdió la noción del tiempo, aunque supone que cerca de un mes”, agregó la testigo, que no cobraba por los servicios y que sabía que  una “mujer” recibía el pago.

Ante la pregunta de que si la joven, efectivamente, le había confirmado que era presionada a mantener relaciones sexuales, Wagner reafirmó que “ellas eran obligas a tener relaciones con hombres”.

Beatriz Wagner, contó como la joven relató que se escapó “ella pidió permiso para comprarse algo enfrente del lugar y corrió hasta la Terminal de Ómnibus. “No tenia el dinero para el pasaje, pero la gente de la empresa Crucero del Norte se lo facilitó de todas maneras después de que ella les explicó que se estaba escapando, y así llegó hasta Posadas”.

Según Warner después de lo que le contó la niña, la llevó a la oficina de Dirección de Migración, para después ir hasta el Juzgado Federal, donde la menor le contó al juez lo mismo que le había contado a ella. “Lo único que agregó, que no me había contado a mi, es que a veces la sacaban de Spartakus para llevarla a otros lugares”, concluyó. (www.PergaminoCiudad.com.ar)