Hablar de Jorge Jater es hablar, ante todo, de una gran persona, solidaria, generosa, luchadora, comprometida con las causas populares y la sociedad en su conjunto. Ahora bien, hablar de Jorge Jater en pasado, cuesta mucho más de lo imaginado. La muerte del edil mandato cumplido, el último viernes, causó desazón, sorpresa y tristeza en varias esferas de nuestra ciudad, sin importar el color político al que uno pertenezca.

Tuve la oportunidad de entrevistarlo en varias oportunidades, tuve la oportunidad de formar diríamos una especie de amistad, que me ayudó a conocer mucho más del funcionamiento político de Concejo Deliberante, pero también conocer mucho más de su trabajo y su sabiduría, producto de una gran cantidad de años de militancia.

Jorge Jater fue siempre generoso, siempre mostró su disponibilidad cuando mi grabador lo requería  y estuvo siempre atento a las requisitorias de este periodista, cuando algún tema o alguna ordenanza o algún proyecto dentro del Concejo era difícil de comprender, si no se contaba con la ayuda de un político entendido en el tema.

El off the record funcionó de maravillas con Jorge, ya que no sólo podía golpear la puerta del bloque Hacer por Buenos Aires para someterlo a preguntas periodísticas, grabador de por medio, sino que muchas veces pude visitarlo para interiorizarme en algún tema, que mate de por medio (aunque después se convirtió en mate de té), se convertía en charlas interminables o debates muy ricos cuando cada uno mostraba y defendía la posición en tal o cual temática, para luego terminar la jornada en la búsqueda de consenso.

Se ha dicho mucho de Jorge en esta semana, se ha hablado mucho de su carrera política, de su trayectoria o de su currículum personal, pero yo sólo quería destacar la persona detrás del político, que me dejó gratos recuerdos en mis años de cubrir el Concejo Deliberante y de recorrer a diario esos pasillos en la planta alta del municipio.

Su último gran logro fue el cambio de denominación de la Avenida Roca por Avenida de Mayo. El no va a estar presente en el acto oficial, pero seguramente tendrá el reconocimiento que se merece, en ese día que tanto estaba esperando.

Le quedaron muchos proyectos por concretar, según me contaba cada vez que lo encontraba en las calles de la ciudad, pero también logró muchos otros y estoy seguro que, más allá de las críticas que ideológicamente alguien le pudo haber hecho, a todos nos entristeció y aún nos cuesta creer en su ausencia.

Gracias Jorge por estos años de apoyo en la profesión, por estos años de generosidad, por todo lo que me enseñaste y por haber tratado de mantener tus principios en un mundo tan cambiante como el de la política. Hasta siempre concejal…